Hermanos hondureños

Por Adelfa Martín (Guadalajara-Jalisco/México)

De noche, como lanzan los zarpazos
los cobardes, amparados en sus bajos
instintos, se hizo la traiciòn a un pueblo
que dormìa confiado e inocente.

Y fueron muchos, armados hasta los dientes
embozados tras sus máscaras de miedo y terror.

Y con desfachatez, pretenden presentar
al mundo que los vigila acuciosamente,
un amago de legalidad en la que nadie cree.

Una vez mas, los sueños libertadores
de los hèroes de este sufrido continente
se ven pisoteados por los mismos,
los de siempre, los que agazapados
esperan en silencio poder asestar el golpe.

Los que temen a la palabra libertad
que hace tambalear sus cotos de poder,
y manipulan y asustan a los incautos

con su labia persuasiva e hipòcrita,
viendo caer en sus redes a quienes hasta
ayer se proclamaban demócratas.

No lograràn su propòsito.

Como pocas veces en la historia
el mundo en forma unánime
ha rechazado el golpe de estado en la
hermana República de Honduras.

Que así sea, sitiados y despreciados
por los seres pensantes y buenos
tendràn que retroceder, aceptar su fracaso.

Es hoy Honduras el vejado,
pero mañana podemos ser nosotros.
Esos àngeles negros pululan por doquier
movièndose, reptando en la oscuridad,

con discursos de contenidos y fines que
se repiten històricamente

NI UN PASO ATRÀS...